Las impresoras 3D son máquinas que requieren de un mantenimiento regular según su uso, materiales empleados, labores de ajuste, etc. Su funcionamiento es bastante delicado, sus mecanismos son susceptibles de ensuciarse fácilmente y algunas partes móviles podrían desajustarse y provocar un mal funcionamiento.
Para que tus impresiones siempre conserven una óptima calidad, uno de los cuidados más importantes de tu impresora 3D es el mantenimiento periódico y la limpieza que tú mismo debes hacer con cierta frecuencia. Debes prestar especial atención a aquellos detalles que podrían ocasionarte problemas durante la impresión o a tus modelos, como:
Boquilla
La limpieza de la boquilla es una de las tareas más habituales, pues la debes realizar inmediatamente después de haber usado tu impresora 3D. La boquilla se obstruye porque restos de un filamento solidificado impiden parcial o totalmente la salida del nuevo filamento.
La boquilla la debes limpiar cuando aún está caliente. Utiliza unas pinzas de punta fina para retirar los desechos acumulados alrededor del orificio de salida (arriba); con un limpia boquillas flexible desprende el material solidificado en las paredes interiores (en medio); y con un pequeño cepillo con cerdas de latón limpia bien el exterior (abajo).
También puedes usar un filamento de limpieza diseñado específicamente para adherirse a cualquier suciedad o residuo solidificado en el interior de la boquilla y juntos, ser extruidos. Es buena idea utilizarlo cuando pienses cambiar el color del filamento o el tipo de material y para limpiar periódicamente el hotend y la boquilla de tu impresora 3D y asegurarte que la alimentación sea suave y uniforme. Para usar este filamento simplemente debes extruir unos 30 cm (12″/1 pie) de material, elevando 10ºC por encima de la temperatura de fusión del último filamento que empleaste para imprimir, en un amplio rango de temperatura 160 – 260ºC.
Es buena idea utilizar regularmente un filamento de limpieza para limpiar el interior del hotend y desprender los desechos de filamento carbonizados. Evita usar filamentos que no sean los recomendados por el fabricante o aquellos de baja calidad, pues podrían llegar ocasionarle serios daños a tu impresora 3D.
Para limpiar el interior del hotend debes previamente calentarlo a una temperatura más alta a la de los termoplásticos utilizados; esto fundirá cualquier resto. Retira la alimentación de filamento y extruye manualmente unos centímetros de material hasta expulsar completamente los restos del filamento anterior.
Utiliza un limpia boquillas de menor diámetro al de la boquilla para fragmentar los desechos carbonizados adheridos a las paredes internas, a fin de extruirlos con mayor facilidad. Las pinzas de punta fina te serán de suma utilidad para empujar la varilla metálica y eliminar los restos de plástico que queden adheridos, puesto que estará demasiado caliente por su contacto con la boquilla. Al dejar de salir restos de plástico, prueba extruir un nuevo trozo de material. Repite los pasos anteriores hasta que la extracción de filamento se normalice.
Plataforma de Impresión
La limpieza de la superficie de impresión es una tarea que debes realizar según sea su condición después de varios usos o cada vez que pretendas usar un filamento de distinto material. Recuerda que la calidad de tus modelos empieza por imprimirlos sobre una superficie que permita la adhesión necesaria y sin residuos que obstaculicen la impresión.
Retira la plataforma de impresión de tu impresora 3D. Con un paño suave humedecido con alcohol isopropílico limpia la superficie y luego lava la plataforma con agua fría y jabón. Cuando sea necesario emplea una espátula para desprender los residuos plásticos o puedes sumergirla por unos 30 minutos en agua caliente para que se despeguen aún más fácilmente. Sécala bien con una toalla de papel y estarás listo para imprimir nuevamente.
Ejes, varillas y poleas
La limpieza y lubricación de ejes, varillas y poleas es una de las tareas del mantenimiento preventivo que la deberás realizar de acuerdo al uso de tu impresora y a las condiciones del entorno (humedad, polvo, ventilación, etc.), pero al menos, hazlo dos o tres veces al año a fin de proteger las partes metálicas, generar desplazamientos de los ejes y la base más suaves y continuos, así como atenuar los niveles de ruido.
Remueve la grasa de las varillas lisas y roscadas de los ejes y vuelve a lubricarlas. Lo más aconsejable es utilizar grasas o aceites lubricantes sintéticos con PTFE porque no gotean y dejan una película que confiere unas excelentes propiedades deslizantes a los elementos de guiado y reduce el desgaste de los elementos deslizantes. Una brocha fina o un pincel te serán de suma utilidad para esparcir el lubricante y retira los excedentes con una toalla de papel.
Correas dentadas
Verifica y ajusta la tensión de las correas de las poleas a cada cierto tiempo, ya que el continuo uso de tu impresora 3D las podría desajustar y provocar deslizamientos, vibraciones o movimientos inadecuados de la base y los ejes, lo cual hará que la impresión de tus modelos se haga de forma incorrecta.
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Fecha de Publicación 02/09/2019